Cuando ponemos en marcha un Raspberry Pi, generalmente solemos apostar por Raspberry Pi OS, el sistema predeterminado que nos recomiendan sus desarrolladores. Sin embargo, existen muchas otras alternativas por las que podemos apostar para poder exprimir al máximo este dispositivo en función del uso que le vayamos a dar. Y, hoy, nos llega una de las distros más interesantes con la que podremos usar este micro-pc como un completo ordenador: MX Linux.
MX Linux es una de las distribuciones Linux más populares que podemos encontrar hoy en día. En concreto, ha sido la distro más bajada e instalada de todo 2023, ya que ofrece a los s un equilibrio entre usabilidad, rendimiento y fiabilidad. Se trata de un sistema basado en Debian (como Ubuntu), pero donde en lugar de estar dominado por una gran corporación, destaca por tener muy en cuenta las solicitudes y recomendaciones de la compañía.
programas instalados de serie para que podamos sacarle el partido al dispositivo. Entre otros, podemos destacar por Chromium, como navegador web por defecto, LibreOffice, VLC y, por supuesto, Raspberry Pi Config y Pi Imager, dos herramientas específicas para este mini equipo.
Cómo instalarlo
Para instalar este sistema en el Raspberry Pi, lo único que necesitamos es descargar la nueva versión desde este enlace. Una vez tengamos la imagen, simplemente debemos grabarla a la tarjeta de memoria (o pendrive) con el que vayamos a arrancar el mini-ordenador y listo. Durante el primer arranque veremos un sencillo asistente de configuración inicial desde el que podremos configurar algunos de los parámetros estándar del sistema.
Eso sí, se recomienda tener al menos 16 GB de espacio disponible en la memoria para que el sistema pueda funcionar con total normalidad. Una vez lo tengamos instalado y funcionando, podremos empezar a trabajar con él como si se tratase de cualquier otro sistema Linux. Es decir, podremos buscar y bajar programas, navegar por Internet, compilar código… todo lo que queramos. Y lo haremos desde este minir-ordenador que podemos llevar siempre en el bolsillo.