En pleno 2025, el mercado de los sistemas operativos para nuestros dispositivos se ha diversificado en la búsqueda de un público objetivo cada vez mayor. Microsoft, Linux y Google juegan sus bazas con sus virtudes y defectos, que vamos a analizar en el siguiente artículo. De esta manera, podrás sopesar qué sistema operativo elegir según tus propias preferencias
Windows, Linux y Chrome OS emplean distintas armas en un mismo mercado, pero si hacemos un análisis de cada uno de ellos, podemos encontrar diferencias que les aporta a cada uno funcionalidades y estilo propio. La universalidad de Windows, la personalización de Linux y la accesibilidad de Chrome son decisiones medidas al milímetro por sus empresas matrices para atraer a clientes potenciales. Vamos a verlo.
Windows: la opción de mayor compatibilidad
Y es que, ¿quién no conoce el sistema operativo propiedad de Bill Gates? La inmensa mayoría de hardware, software y aplicaciones están desarrolladas para ser compatibles con el entorno más utilizado alrededor del globo, tanto a nivel empresarial como particular. En su haber, podemos encontrar un equilibrio entre la accesibilidad de su interfaz y sus funciones avanzadas, si ello es lo que requerimos. La tendencia de las últimas versiones del sistema operativo, cuyo estandarte hoy en día lo encontramos en Windows 11, avanza hacia un diseño efectivo e intuitivo.
Hay un pequeño problema que en ciertas circunstancias podrían echar para atrás a ciertos s: su dependencia de conectividad a internet para el funcionamiento correcto. El sistema de Google está orientado hacia un uso intensivo de los servicios en la nube: Google Docs, Gmail, Google Drive… aun así, hay que decir que desde la compañía californiana han hecho un gran trabajo para ampliar su catálogo de opciones offline. Además, al ser el sistema más joven de entre los tres, su catálogo de aplicaciones no ha tenido el mismo tiempo que Windows o Linux para brillar en consonancia.
¿Cuáles son tus necesidades? En base a esa pregunta, podrías empezar a plantearte el uso de uno de los tres. Y si bien es Windows el que históricamente ha colmado el mercado con rotundidad, no es menos cierto que sus dos competidores son igual de funcionales y sólidos a la hora de rendir.