El mayor problema de Google Chrome es la gran cantidad de memoria RAM que consume. Sobre todo cuando tenemos muchas pestañas abiertas. Y de sobra sabemos que, aunque acumulemos muchas pestañas abiertas, las que solemos usar al mismo tiempo suelen ser un par de ellas, pocas más. Por tanto, todas las demás que están cargadas en la memoria solo están malgastando RAM y afectando al rendimiento del PC. Así aparecieron extensiones, como The Great Suspender, que nos prometen suspender todas estas pestañas que no usamos para ahorrar memoria en el PC. Una extensión con millones de s que, desgraciadamente, acaba de ser marcada como malware.
A lo largo del tiempo, The Great Suspender se ha ganado la confianza de los s. Esta extensión se ha convertido, para muchos, en una de las extensiones imprescindibles para
No es la primera vez que circulan rumores sobre malware en torno a esta extensión. Desde la versión 7.1.8 de la misma se sospecha que hay un exploit en su interior que permite tener el control casi total de todo el PC. Esto ya hizo en el pasado que Microsoft eliminara la extensión de su tienda. Y ahora es Google quien mueve ficha.
Si tenemos instalada esta extensión en nuestro navegador debemos eliminarla cuanto antes. Al menos hasta que se aclaren estos problemas. Y si queremos seguir ahorrando memoria mientras navegamos debemos dar una oportunidad a The Marvellous Suspender.
The Marvellous Suspender, nueva extensión sin malware
Esta es una nueva extensión subida a GitHub hace apenas dos semanas. La extensión se basa en el código fuente original de The Great Suspender pero antes de la polémica versión lanzada tras su compra. De esta manera estamos seguros de que esta extensión es fiable, no sigue a los s, no muestra anuncios ni tiene malware.
De momento no sabemos si Google recapacitará y volverá a subir la extensión a la Chrome Store, o si esto es un adiós definitivo. Sea como sea, parece que hay cosas sucias dentro de The Great Suspender. Y por ello, es necesario borrar la extensión cuanto antes de nuestro navegador.
