Especialmente en los últimos tiempos, todo aquello relacionado con la seguridad en nuestros dispositivos se ha convertido en algo básico. Una de las razones de ello es que cada vez trabajamos con información más sensible en los mismos. Razón de más para que tengamos cuidado con los posibles virus o todo tipo de código malicioso que pueda llegar a nuestro equipo a través, por ejemplo, de una aplicación.
En estos momentos nos podemos encontrar con multitud de formatos de malware que pongan en peligro nuestros datos, aplicaciones, sistema operativo, etc. De ahí la casi obligatoriedad de disponer de un antivirus instalado en el PC.
Evidentemente lo primero que debemos hacer es cancelar la ejecución de cualquier programa señalado como malicioso. En el caso de que ya esté en funcionamiento, probablemente el antivirus nos dé la posibilidad, bien de eliminarlo, bien de ponerlo en cuarentena. Lo más efectivo probablemente sea borrarlo de manera inmediata, pero si tenemos dudas acerca de que se trate de un falso positivo, también podemos ponerlo en cuarentena para asegurarnos.
En el caso de que estemos seguros de que esa aplicación pueda estar infectada por algún tipo de código malicioso, si no lo hace el antivirus deberíamos eliminarla de inmediato nosotros a mano. Para asegurarnos en Windows y que no se almacene en la papelera, debemos pulsar la tecla Shift al mismo tiempo que Supr. A su vez otro paso muy importante para evitar males mayores es tomar alguna medida de precaución posterior. Con esto os queremos decir que una vez nos hayamos deshecho del ejecutable de la aplicación maliciosa, no estaría de más realizar un análisis completo del sistema. Para esto de nuevo el antivirus será un software más que adecuado.