2023 ha sido un año movido para Netflix. El gigante del streaming subió el precio de las suscripciones un montón, erradicó el uso de cuentas compartidas, y ha empezado a marcar el camino hacia un servicio «», al menos en lo que al precio se refiere. Está claro que muchos s se iban a dar de baja por estas razones. Sin embargo, el gigante del streaming tenía un as en la manga que, aunque pensábamos que iba a ser un fracaso, ha sido un éxito rotundo: su nuevo plan barato.
Netflix ofrecía a los s tres planes: el Básico, o barato, con calidad baja y solo para un dispositivo al mismo tiempo; el Estándar, un plan que ya permitía ver contenido en HD y hasta en 2 dispositivos al mismo tiempo; y el , uno de los más cotizados, con calidad 4K y con la posibilidad de verlo con 4 personas al mismo tiempo. El año pasado, el plan barato de Netflix desapareció, eliminando la calidad SD y dejando a los s con la posibilidad de contratar cualquiera de los otros dos planes, los cuales eran más caros.
Un servicio añadido que está bastante bien, pero que, de serie, arrastra problemas. Y es que Netflix no quiere tener algo que no le genere dinero. Y, por tanto, la compañía ya trabaja en monetizar este servicio cuanto antes. ¿Nuevos planes para los juegos? ¿Más restricciones? Pronto lo sabremos. Lo que sí está claro es que, en unos meses, veremos una nueva subida de precios.