Que con el paso del tiempo Windows empiece a ir lento y a quedarse sin espacio no es nada nuevo. El sistema operativo va guardando todo tipo de archivos basura, temporales y de caché que, a la larga, afectan negativamente al rendimiento general del ordenador. Es por ello por lo que, si queremos que nuestro Windows funcione siempre lo más rápido posible, es necesario llevar a cabo ciertas labores de mantenimiento en el PC, como la que os vamos a contar aquí.
Antes de empezar a liberar ese espacio malgastado en el ordenador, y a aumentar su velocidad para que Windows vuelva a funcionar como recién comprado, lo primero que recomendamos es disco duro, sino que liberaremos recursos, evitaremos que se ejecuten procesos, y Windows funcionará mucho mejor.